ANÁLISIS BURNHOUSE LANE
Hoy tenemos ante nosotros la última obra del estudio polaco Harvester Games, Burnhouse Lane. El jugeo se lanzó en PC el pasado mes de diciembre y el 29 de junio llegaba a consolas tras su exitoso paso por compatibles. En este análisis, os contaremos que nos ha parecido su versión para Xbox habiéndolo jugado en una Xbox Series X.
INTRODUCCIÓN E HISTORIA
El juego, si tuviéramos que calificarlo dentro de alguno de los manidos géneros de videojuegos seria una aventura point and click en 2D. Asumiremos el papel de Angie Weather, una enfermera a la que le quedan pocos meses de vida puesto que nos han diagnosticado un cáncer incurable y sin salvación. Tras aceptar el trabajo como sustituta de una cuidadora de un anciano, llegaremos al domicilio del mismo y ese será el punto de partida para una historia en la que, tras un giro algo bizarro de los acontecimientos, deberemos realizar un total de 5 pruebas con las que salvar nuestra vida e intentar esquivar nuestro fatídico destino.
Con ese sugerente inicio, el juego mezcla una historia en la que el horror, lo a veces paranormal e inexplicable así como la historia más personal de la protagonista se dan la mano de una manera muy inteligente, pegándote a la pantalla de manera muy interesante con el ánimo de querer saber más y saber que pasará al final.
Este es sin duda uno de los puntos fuertes de este juego, todo el trasfondo de la protagonista, los personajes con los que se relaciona y sus historias, así como lo bien contada y dura que peude ser su historia. Se tocan temas muy sensibles desde la muerte, la enfermedad, la soledad o la perseverancia y las ganas de vivir. Su mensaje, advertimos, es duro y removerá muchas conciencias. Pero todo ello sin caer en tópicos y yendo al grano. Y siempre añadiendo ese toque de misterio y horror que caracterizan las obras del estudio polaco.
Si bien es cierto que podemos achacar muchas «inspiraciones» en su opera prima «The Cat Lady», este juego es independiente del mismo y puede ser disfrutado hayas jugado o no a dicho juego, del que bebe claramente (la historia de Susan en The Cat Lady es claramente parecida).
Analicemos ahora que nos ha parecido su
JUGABILIDAD
Como decía, estamos ante lo que seria una aventura point and click en una vista 2D pero con salvedades.
Para empezar, el juego abraza este género pero de una manera muy «light» en el sentido en que, por ejemplo, no tendremos que combinar items del inventario con otros items del inventario. Tan sólo un item nuestro servirá con algo del escenario, cosa que facilita mucho las cosas y hace que no sea necesario estrujarte el cerebro para dar con la solucion a los puzles.
Dichos puzles suelen ser sencillos, bien introducidos, y lógicos con la coherencia que se nos cuenta en pantalla. No tendremos que hacer combinaciones extrañas y siempre tendremos claro nuestro objeivo (hasta tal punto que en el menú de objetos tendremos marcado lo que debemos hacer en la historia).
Pero es que además de estos elementos clásicos de las aventuras gráficas, tendremos algún que otro elemento añadido, aunque quizás no sean estos los que más brillen.
Tendremos algo de combate, ya que a lo largo de la aventura podremos encontrar alguna arma y deberemos liquidar algún enemigo. Eso sí, no habrá que apuntar ya que, al ser en 2D se ha optado por un combate sencillo que tan solo levantando el arma y disparando, acertaremos al enemigo. En ocasiones, no tendremos armas y nuestro único vehículo de salvación será el «dash» o arremeter para adelante para sortear al enemigo.
Y también tendremos algún pequeño segmento más plataformero, puesto que jugaremos «como otro personaje del juego » (sin ánimo de spoilear nada) en el que tendremos que avanzar pudiendo saltar obstáculos y midiendo bien nuestros saltos.
Aún así, estos dos últimos apartados (acción/disparo y plataformas) no brillan tanto como nos hubiera gustado o como luce su parte más clásica. Se sienten añadidos que se agradecen para dar esa variedad y salir del mismo tono pero, a su vez, se sienten elementos menos trabajados o con los que el estudio no se siente tan agusto. Su mayor exponente de este bajón a nivel jugable es una pelea con una especie de boss en la que tenemos un hacha.
Fruto de estos añadidos es la novedad de poder morir, cosa que en la mayoría de aventuras gráficas no suele ocurrir.
Pero como conclusión de su apartado jugable, estamos ante un título que a pesar de no revolucionar el género, su ejecución está muy lograda y acompaña muy bien a lo que se nos cuenta en pantalla, que no deja de ser, en mi opinión, lo más importante.
VISUAL, SONIDO Y MÁS
Estamos ante un port o versión de consolas perfecto. Aunque ya desde inicio hacemos la salvedad de que al tratarse de un juego no muy cargado gráficamente y que sus requisitos en PC eran muy asumibles, es normal que el trabajo de llevar el juego a consolas haya salido bien. Aún así es de agradecer la ausencia de bugs o glitches gráficos y que goce de características tan agradecidas como el Quick Resume en Xbox.
A nivel de frames y rendimiento ha sido una experiencia perfecta y el juego se disfruta perfectamente con mando (incluso con vibración, característica que muchos de estos juegos o ports obvian)
A nivel visual, si habeis visto las capturas que acompañan este análisis, habréis visto que estamos ante un estilo muy particular, con un nivel de detalle espectacular y que su paleta de colores ayuda a construir su tono «creepy» y de horror inesperado a lo largo de todo el juego. Si que es cierto que las animaciones tipo «ragdoll» de los personajes quizás podían haber estado algo más elaboradas, pero también entendemos que desde el estudio se quiere hacer así y también encaja con el tono del juego.
A nivel musical el juego si que brilla con luz propia. Tanto los efectos sonoros que acompañan a lo que vamos viviendo en el juego como las canciones que se reproducen en las escenas más narrativas tienen una calidad excelsa y se trata de también uno de sus puntos fuertes.
En lo que respecta a la duración, los 7 capítulos que tiene el juego se pueden completar en unas 10 horas aún muriendo algunas veces: dichas muertes no suponen muchos problemas al haber un punto de guardado cerca. Por cierto, esos puntos de guardado son ceniceros en los que la protagonista se fuma un cigarro, curiosa forma de guardar el juego teniendo en cuenta la temática y la historia del mismo.
Y si te quedas con ganas de más, el juego tiene varios finales con los que podrás experimentar otras decisiones y sus consecuencias.
El juego viene en inglés y no dispone de español, ni tan siquiera sus subtítulos, cosa que puede echar para atrás a alguno de los jugadores
CONCLUSIONES
Burnhouse Lane nos cuenta una historia muy interesante y que es dura a la par que explícita. Sin medias tintas, el estudio nos propone una jugabilidad clásica a la que intenta añadir algo de variedad con el uso de armas y unas ligeras plataformas.
Si te gustan las buenas historias y no quieres estrujarte el cerebro con puzles complicados, sin duda debes probar la nueva obra de los creadores de The Cat Lady.
PUNTOS FUERTES
- Una historia muy interesante y que golpea duro
- Un apartado sonoro excelente
- Un port a consolas perfecto
PUNTOS DÉBILES
- No venir subtitulado al español
- El juego no brilla tanto cuando se aleja de su base jugable
Hemos podido realizar este análisis gracias a un código cedido por Feardemic
