CRÍTICA MY DRESS UP DARLING TEMPORADA 2 – UNA CONTINUISTA
En el día de hoy me gustaría compartir con vosotros una nueva crítica de uno de los animes que han acabado recientemente de la temporada de verano.
Se trata de la segunda temporada de My Dress-Up Darling o Sono Bisque Doll wa Koi wo Suru, la obra de Shinichi Fukuda que hemos podido seguir a través de la plataforma de streaming de Crunchyroll.

Las tensiones siguen creciendo…
Como era de esperar esta nueva temporada ha tenido de todo. A lo largo de estos 12 capítulos hemos visto como ha ido creciendo la relación de «amistad-amor» entre Gojo y Marin creándose en ocasiones divertidos malentendidos e incluso momentos bastante tensos por las locuras que se le pasan en la mente de cada uno.
Para empezar la serie ya de por sí, en su primer capitulo, nos mostraba que Gojo cae bastante pronto en la tentación y más cuando Marin juega con su inocencia hasta el punto de provocarlo en muchas ocasiones de manera indirecta con sus atrevidos cosplays.
Cosplays que han llevado en esta segunda temporada nos han ayudado a seguir profundizando en su mundillo en esta segunda temporada. Y es que se nos han presentado a diferentes cosplayers y algunos de sus trucos para cambiar sus cuerpos e incluso sus sexos por amor a sus personajes o por ejemplo cuándo al final de la temporada se nos muestran los temores de Juju en los que se planteaba incluso dejar el Cosplay.
Por suerte la obra trata muchos de estos temas de una forma bastante humana y los muestran tal y como es. Una afición que puede significar muchísimas cosas para cada uno y dónde mostrar esa pasión no es nada malo como bien descubrió Akira en su momento.

La escenografía sigue siendo espectacular
A lo largo de los diferentes episodios, justamente cuándo la serie se centra en los cosplays, nos han dejado escenas impresionantes como el concurso escolar dónde toda la clase está atenta a ver como trabaja Gojo o incluso cuando están haciendo las escenas de Ataud y vamos viendo como Juju está intentando no mirar a los «suculentos» platos que estaban sobre la mesa.
Esto también nos ha ayudado a conocer también más sobre como usar correctamente una cámara y que seguro que muchos fans podrán sacarle bastantes usos en la vida real.
Pero lo mejor de todo son los momentos del Capítulo 19 o el 24 dónde vemos a una Kitagawa más suelta dónde sus expresiones la hacen lucir mejor y dónde destaca sobretodo el arte CloverWorks con sus coloridos.
Una sensación extraña que me ha recorrido en esta nueva temporada
Entiendo que estamos viendo una segunda temporada y todo eso pero… en estos nuevos episodios me ha faltado algo.
Muy probablemente sea porque se ha juntado con el final del propio manga o simplemente porque la primera me enganchó fuerte y con esta ya estaba preparado.
Esto no le quita ningún mérito a que la obra y los personajes me sigan pareciendo fantásticos y más cuando plantean cosas «distintas» más allá del simple romance como la creación del atrezo o el uso de la cámara profesional y como un simple ángulo puede cambiar completamente la percepción.
Conclusión
Esta segunda temporada a pesar de dejarme esa sensación extraña sigue siendo muy disfrutable y más cuando tengamos la ocasión de disfrutarla doblada, que por el momento todavía no ha llegado.
Puntos Positivos:
- El mundo del cosplay sigue creciendo gracias al detalle que le ponen durante la trama
- A nivel visual es un espectáculo en muchos momentos
- La relación entre Gojo y Marin sigue creciendo…
Puntos Negativos:
- Aunque por desgracia muchas de las situaciones que vemos durante la obra se repiten con respecto a ellos dos
