ANÁLISIS SUPERCAR COLLECTION SIMULATOR – A TRAVÉS DE NUESTRA PROPIA TIENDA, PODREMOS COMPETIR CONTRA DIFERENTES JUGADORES PARA TENER EL COCHE MÁS RÁPIDO
La gestión siempre ha sido una de las mecánicas más utilizadas por los juegos de estrategia. Pero en los últimos años, hemos visto como esa gestión ha ido variando en pos de una creciente demanda y oferta de juegos de gestión de establecimientos. Se empezó hace muchos años pero, en aquel entonces, la fama que alcanzaban este tipo de juegos no era para nada desorbitada. Ahora, vivimos unos años diferentes, donde los jugadores desean experimentar otros trabajos mientras se divierten jugando a sus consolas u ordenadores.
Y esto es algo paradójico, ya que la mayoría de nosotros deseamos adentrarnos en nuestra consola u ordenador para despejarnos de la vida cotidiana. Sin embargo, estos juegos lo único que hacen es devolvernos en cierta manera a esa vida diaria que llevamos día tras día pero en diferente negocio. Aun así, esto no parece que vaya a cambiar y Supercar Collection Simulator ha llegado a la industria para dejarnos llevar una tienda de coches de colección con los que poder competir contra los diferentes jugadores y clientes que vayamos teniendo en nuestro establecimiento.
Es un más de lo mismo pero con un enfoque diferente
En esta primera parte del análisis nos gustaría hablar de la jugabilidad que presenta Supercar Collection Simulator. Un juego que, como ya hemos nombrado anteriormente, se basará en gestionar nuestra tienda para ir consiguiendo dinero y desbloqueando diferentes mercancías con las que poder obtener la colección de mini-coches definitiva. Seguramente, una vez comencéis a disfrutar del juego, os vendrá a la cabeza los Hot Wheels, por lo que vuestro niño interior se ilusionará de inmediato con la idea.
El problema es que por lo demás, estamos ante un juego que sigue siendo un más de lo mismo. Todos los juegos de este estilo tienen la misma jugabilidad: Compra, coloca en las diferentes estanterías y vende. Así un ciclo continuo hasta poder conseguir una cierta reputación que te valga para desbloquear a los posibles trabajadores. Ahí, podrás deshacerte un poco de los quehaceres más aburridos y poder centrarte únicamente en la faceta de coleccionar los coches y poder competir con ellos.
Y es aquí donde está la mayor diferencia en comparación con los demás juegos, en Supercar Collection Simulator tendremos la oportunidad de ver en acción a nuestros mini-coches para conseguir el vehículo del contrincante. Esto es algo muy divertido. Para poder disfrutar de esta posibilidad, tan solo tendremos que adquirir uno de los circuitos a la venta para colocarlos en nuestra tienda y una vez realizado, esperar a que llegue el primer cliente dispuesto a apostarse su vehículo contra el nuestro.
No será únicamente ver cómo corren porque sí, sino que también tendremos a nuestra mano la posibilidad de atribuirle a cada vehículo unas determinadas habilidades que podremos utilizar durante la carrera, como si del Mario Kart se tratara. Ante esta faceta que nos despliega el juego, solo podemos aplaudir. En cuanto a lo demás, hay mucho trabajo que hacer y muchas cosas que cambiar para conseguir que Supercar Collection Simulator se diferencie del resto.
Unos gráficos aceptables dentro de las posibilidades
Todos tenemos conocimiento de que no todos los estudios son capaces de ofrecernos unos gráficos hiperrealistas en los que quedarnos embobados con los paisajes. Y por ello, no todos los juegos que no lo tienen no son buenos gráficamente. Para solucionar esta desventaja, la mayoría de estudios tienen en sus filas a artistas que nos despliegan todo su potencial para deleitarnos con obras que, en muchos casos, superan a la realidad. Aun así, Supercar Collection Simulator no está entre esos juegos creados por los estudios ante citados.
Nos encontramos con un juego que tiene unos gráficos aceptables y que no tendremos problemas en disfrutar del título. Sin embargo, no será uno de esos juegos que nos deje con ganas de seguir viendo más del título por su estilo artístico, idéntico a los múltiples juegos que son de este estilo. En cuanto a la banda sonora, seguimos en la misma línea, un juego que es en todo aceptable y que no destaca en nada. Por ello, creemos que es un juego con el que puedes disfrutar durante unos cuantos días pero que tiene todavía mucho que mejorar para conseguir engancharte.
Conclusión
Supercar Collection Simulator no es un juego que te vaya a cambiar la vida, eso lo sabíamos desde que iniciamos la primera partida. Una vez superada esa fase, estamos ante un juego que nos da lo que nos dice, la gestión de una tienda en la que, aparte de vender mini-coches, también podremos ir ampliando nuestra colección para competir contra otros rivales. En según que cosas es un juego maravilloso pero en otras, se queda en la media del resto de juegos del estilo.
Puntos Positivos
- La posibilidad de competir con nuestros mini-coches
- El involucramiento de los desarrolladores por añadir contenido
- Un progreso aceptable
Puntos Negativos
- Una originalidad escasa en la jugabilidad
- Algunos pequeños bugs que han complicado nuestras partidas
