ANÁLISIS SHANTAE ADVANCE RISKY REVOLUTION
Shantae Advance: Risky Revolution es un juego que ha tardado dos décadas en ver la luz. WayForward comenzó a desarrollarlo para Game Boy Advance, pero por distintos contratiempos, el proyecto quedó guardado en un cajón mientras la saga continuaba con nuevas aventuras de la querida semi-genio. Ahora, por fin, han decidido rescatar esta entrega, darle un pequeño retoque visual y lanzarla tanto en consolas actuales como, curiosamente, en su formato original de GBA.
Shantae regresa tras veinte años de espera para volver a enfrentarse a Risky
Shantae Advance: Risky Revolution ofrece una historia sencilla pero efectiva, tal como suele ser habitual en los juegos de nuestra semi-genio favorita. En esta aventura, nos enfrentamos a Risky Boots, la pirata malvada que pretende hacerse con todos los tesoros de Sequin Island, y nuestro objetivo es frustrar sus planes. Lo que no esperábamos es que Risky cuenta con una máquina sísmica capaz de poner la isla patas arriba, dejando a todos sus habitantes completamente descolocados.
Con esta premisa simple, llegamos a uno de los puntos fuertes de la saga: la jugabilidad. La franquicia de Shantae, y en especial esta entrega, se caracteriza por ser un juego de plataformas con backtracking, en el que volvemos a zonas ya exploradas una vez que desbloqueamos nuevas habilidades. A lo largo de los distintos escenarios, saltamos, enfrentamos enemigos y usamos tanto el característico pelo de nuestra protagonista como una variedad de poderes que vamos adquiriendo conforme avanzamos, haciendo que la exploración y la acción se mezclen de forma muy entretenida.

Dificultad ajustada, aunque con menos reto que en los demás títulos de la franquicia
Shantae Advance: Risky Revolution tiene una curva de dificultad bastante amable, lo que nos permite familiarizarnos poco a poco con los controles y las habilidades, mientras nos enfrentamos a enemigos cada vez más desafiantes.
La versión Deluxe añade un extra muy interesante: tres trajes especiales con poderes únicos que pueden resultar muy útiles durante la aventura. Cada uno de ellos potencia uno de los tres ataques especiales que Shantae puede adquirir en la tienda —la bola de pinchos, la bola de fuego o los rayos eléctricos—, así que elegir cuál usar se convierte en una decisión estratégica que puede marcar la diferencia.

Técnicamente, apuesta por partida doble
A nivel gráfico, WayForward ha tomado una decisión bastante atrevida: aplicar un ligero filtro a la versión original del juego, lo que nos permite disfrutar la aventura casi tal y como fue concebida. Además, la desarrolladora ha incluido ambas versiones dentro del mismo juego, aunque solo la remasterizada cuenta con traducción al castellano.
El apartado sonoro también ha sido fiel al original, con una banda sonora que recuerda a los juegos de 16 bits de la época, dejando claro que WayForward quería entregar Shantae Advance: Risky Revolution tal y como lo imaginaron hace tantos años.
Para quienes no estén familiarizados con la franquicia, hay un detalle esencial de nuestra semi-genio: Shantae puede transformarse en distintos animales para usar habilidades especiales. Desde nadar bajo el agua hasta trepar paredes, estas transformaciones son clave para avanzar en la historia. Por eso conviene explorar cada rincón, aunque eso implique regresar varias veces a lugares ya visitados.

Conclusiones finales: Shantae Advance Risky Revolution
Shantae Advance: Risky Revolution es un título muy entretenido y con su punto de desafío, donde debemos mejorar nuestras propias habilidades para aprovechar al máximo las de Shantae. Explorar cada rincón, descubrir secretos, comprar mejoras y enfrentarnos a los jefes finales de cada zona nos mantiene enganchados, con ganas de llegar al final y detener los planes de Risky Boots.
Es un juego muy recomendable para cualquier fan de la franquicia, ya que ofrece una historia completamente nueva que conecta de forma natural la primera aventura con las posteriores entregas. Podemos agradecer a WayForward por rescatarnos este título que muchos pensaban perdido para siempre, llegando de sorpresa y dejando más que satisfechos a los seguidores de la saga.
Lo que más nos ha gustado:
- Una aventura que creíamos imposible, por fin disponible
- Pese a tener las limitaciones de GBA, cuenta con mecánicas suficientes
- Poder decidir entre los gráficos clásicos y los más actuales
Lo que menos nos ha gustado:
- Se nos ha hecho algo corto.
- La traducción no es muy buena.
