ANÁLISIS ORBYSS EN PC
Lanzado el pasado 24 de octubre sólo en PC, Orbyss es el juego del que hoy os traemos nuestro análisis tras jugarlo. He de reconocer que es uno de esos juegos que podrías llegar a empezar por curiosidad y, sin darte cuenta, te engancha bastante. Lo que nos propone la obra de Misty Whale es controlar una especie de luz que salta de un orbe a otro, y aunque al principio parece algo muy simple, pronto te das cuenta de que esa idea da mucho más de sí.

Lo que más me sorprendió es cómo el juego te va enseñando cosas nuevas poco a poco. Primero solo giras orbes y activas plataformas, pero a medida que avanzas empiezas a manipular el tiempo, usar drones o resolver puzzles que dependen del sonido, aunque también se pueden hacer con señales visuales si prefieres jugar en silencio. Muchas veces me sentí como si estuviera colaborando conmigo mismo: dejaba un orbe preparado en un sitio, cambiaba a otro, activaba algo más lejos y luego volvía para rematar la jugada. Cuando por fin lo conseguía, tienes esa sensación de satisfacción que aportan los juegos de rompecabezas.
La atmósfera del juego es muy tranquila. Todo es minimalista, con luces suaves y un ambiente que casi invita a relajarse. La música acompaña sin molestar y hace que sea fácil concentrarse. La historia no se explica mucho, y reconozco que me sentí algo perdido. Pero entendí que el mensaje es reparar un mundo roto. No es que cuente un relato profundo, pero sí transmite una sensación de viaje y de calma que me gustó bastante.

Eso sí, reconozco que algunos puzzles me dejaron bloqueado durante un buen rato. Hay niveles que no dan pistas claras y te obligan a probar varias ideas hasta que das con la correcta. A veces puede resultar un poco frustrante si no estás con paciencia. También es un juego relativamente corto. Te puede durar unas 3 o 4 horas dependiendo de lo que te atasques. Eso sí, si buscas un juego con personajes, diálogos o una narrativa elaborada, este no es el indicado, porque es mucho más abstracto.
Aun así, Orbyss me dejó muy buena sensación. No intenta ser complicado ni enorme, solo quiere ofrecer puzzles inteligentes en un ambiente bonito y relajante. Y la verdad es que lo consigue. Lo disfruté porque me hizo pensar sin meterme presión, y porque su estilo visual (simple pero elegante) hace que quieras seguir avanzando para ver qué idea nueva te presenta.

Si te gustan los juegos tranquilos, de esos en los que te sientas, respiras hondo y te pones a resolver niveles a tu ritmo, Orbyss es una gran opción. Es corto, sí, pero muy agradable, creativo y diferente. En mi caso, lo terminé con la sensación de haber pasado por un pequeño viaje que vale la pena
