ANÁLISIS NEVERWINTER NIGHTS 2 PS5
Fue en octubre de 2006 cuando se lanzó Neverwinter Nights 2. Hablamos de casi 20 años y siempre que se quiere rescatar una obra de tamaña antigüedad, surgen muchas dudas sobre cómo puede ser el rescatar del pasado ciertos juegos. Y hoy, tras haber jugado a Neverwinter Nights 2: Enhanced Edition en PlayStation 5, os traigo mi análisis para ver si merece la pena rejugarlo (o meterte en él si no lo has hecho nunca) y, además, ver cómo se adapta a consolas un juego que siempre ha sido considerado más de PC que de consolas
Hemos de empezar diciendo que esta edición fue lanzada el 15 de julio de 2025 y reúne el juego base junto con sus tres expansiones (Mask of the Betrayer, Storm of Zehir y Mysteries of Westgate). Tenemos así más de 100 horas de contenido narrativo. Otras caractersiticas de esta versión es que supone el debut en consolas, con funciones como multijugador cruzado (crossplay), soporte multijugador de hasta 4 jugadores y control adaptado al mando DualSense.
Si nos centramos en lo puramente jugable, la jugabilidad conserva su esencia D&D 3.5: profunda personalización y reglas complejas. Esto será un aliciente nostálgico para veteranos, aunque intimidante para quienes vienen de sistemas más accesibles como otras versiones más modernas del ecosistema D&D.
Respecto al combate, se mantiene en tiempo real con pausas activadas por el jugador, lo que quita la emoción táctica de un sistema por turnos y le resta inmediatez frente a la experiencia de mesa.
Pero como quizás lo que más te interese es ver que tal funciona en consolas, he de decir que, en este caso, se ofrece una interfaz rediseñada para mandos, aunque los menús resultan algo rígidos y poco intuitivos. Navegar inventarios o menús requiere más pasos de lo esperado; incluso cambiar de personaje en el grupo implica pulsar varios botones adicionales. Manejar múltiples personajes sigue siendo torpe: cambiar entre miembros del grupo, dar órdenes o gestionar hechizos es engorroso con un mando
El control de cámara mejora ligeramente, pero aún se siente impreciso y demasiado sensible, obligando al jugador a reajustarla constantemente.
Lo que sí que agradecemos son la serie de mejoras técnicas y visuales. Aspyr incorpora mejoras, aunque algo modestas: texturas más nítidas, resolución superior y optimizaciones de rendimiento. Visualmente conserva el estilo original, pero esto juega en su contra ya que puede sentirse algo anticuado frente a RPGs modernos. El rendimiento es más fluido, pero los modelos y efectos siguen pareciendo básicos, especialmente si se compara con títulos más recientes.
También es loable el añadir las 3 expansiones publicadas. Mask of the Betrayer destaca por su narrativa profunda y madura; Storm of Zehir ofrece un enfoque sandbox muy atractivo; Mysteries of Westgate brilla por su ambiente de pirateo y dilemas morales. La campaña base sigue teniendo esos momentos sobresalientes que tanto nos gustaron hace casi dos décadas. Pero no por ello no deja de sentirse algo genérica.
En lo técnico, no nos libramos de errores y tenemos cuelgues frecuentes al crear personajes o durante el juego, especialmente si está instalado en almacenamiento externo. Aunque no se han registrado actualizaciones recientes, hay quienes recomiendan guardar constantemente para evitar pérdidas de progreso.
Entramos ya en el terreno de las conclusiones y he de decir que Neverwinter Nights 2: Enhanced Edition en PS5 es una completa antología que reúne el juego original y sus expansiones, ofreciendo una experiencia extensa y nostálgica. Si eres fan del RPG clásico y las reglas detalladas de D&D 3.5, aquí encontrarás una riqueza narrativa y mecánica difícil de igualar.
Pero su conservación de muchas de las limitaciones del original (una cámara problemática, interfaz poco fluida, diseño anticuado y ausencia de comunidad modding en consolas) lo sitúan por detrás de los RPGs actuales como Baldur’s Gate 3, que ofrecen interfaces más amables, gráficos avanzados y narrativa más cautivadora.
Así pues, sólo podemos recomendarlo a jugadores veteranos interesados en revivir este clásico D&D, o para quienes quieran explorar las expansiones profundas de Obsidian. Nuevos jugadores pueden encontrar la experiencia demasiado áspera o lenta si no están preparados para su estilo complejo y su diseño de hace casi dos décadas.
