ANÁLISIS DEADLY DAYS ROADTRIP – UN ROGUELIKE QUE MEZCLA EL HUMOR MÁS ABSURDO CON LA SUPERVIVENCIA DE OLEADAS
Hay veces en la vida que lo único que queremos hacer una vez llegamos a casa de un día largo es sentarnos y disfrutar de una experiencia que nos aleje de la realidad. Para ello, los videojuegos han ganado gran importancia en los últimos años debido a su amplio catálogo, que nos ofrece una gran retahíla de títulos a los que poder jugar sin más preocupación que la de echar un buen rato. Entre todos los géneros que hay disponibles hoy día, el creado por Vampire Survivors es uno de los más adictivos y divertidos a los que podemos echarle el guante.
Y como buen juego, ha conseguido influenciar a una gran generación de artistas que han desarrollado la idea y creado obras distintas que nos hacen disfrutar de un montón de horas delante de nuestro monitor o pantalla. Entre ellos, se encuentras los chicos de Pixelsplit, el encargado de desarrollar Deadly Days: Roadtrip. En él, seremos un superviviente de un apocalipsis zombi que la única preocupación que tiene es la de poder llegar al malvado jefe final y acabar con la epidemia que asola su pueblo.
La diversión está asegurada
Como es habitual en los juegos de este género, la historia ocupa un plano secundario, uno incluso residual, puesto que lo verdaderamente atractivo es su jugabilidad. En Deadly Days: Roadtrip no escapamos de esa idea, puesto que nos veremos inmersos en un apocalipsis zombi que tiene una cepa claramente señalada en el mapa. Por tanto, nuestra misión será llegar hasta él mientras aniquilamos a todos los no muertos que hay por el camino. La gran diferencia con el resto es la utilización de nuestro autobús para trasladarnos de una parte de la ciudad a otra.
Así, al mismo tiempo que iremos aniquilando y subiendo de nivel, tendremos que ir acaparando todas las reservas de combustibles posibles para conseguir llenar el tanque de nuestro vehículo hasta la siguiente parada. Pero claro está, mientras tenemos una misión tan clara y concisa, también se hará uso de un humor muy atractivo, el cual es capaz de sacarnos alguna que otra sonrisilla por culpa de los diferentes objetos o vestimentas que podremos llevar.
Una aglomeración de mecánicas que lo hace único
Si bien decíamos anteriormente que la jugabilidad era el plato fuerte de este videojuego, no nos quedamos cortos en afirmar que es el mayor atractivo del mismo. Tanto es así que, incluso la dedicación que hay puesta sobre las diferentes mecánicas del juego consigue que el título se sienta único. Para empezar, la jugabilidad es similar a la de Vampire Survivors, a medida que vayamos aniquilando enemigos iremos recogiendo la experiencia en forma de cubitos amarillos para conseguir diferentes mejoras en nuestro personaje, eso sí, llegarán en forma de paquetes de ayuda, donde podremos elegir uno de tres objetos disponibles.
Por otro lado, existe la gestión del inventario, esto será muy similar a lo que puso de moda Resident Evil, donde cada objeto tendrá un tamaño y tendremos que encajarlo en nuestro diminuto pero ampliable inventario. Así, iremos consiguiendo mejoras y armas que se sumarán a las diferentes pasivas que iremos consiguiendo a lo largo de la partida, ya sea en forma de daño para las armas o en cantidad de objetos que podremos llevar equipados. Al fin y al cabo la idea es la misma, sobrevivir el máximo tiempo posible mientras nos encargamos de recuperar todo el combustible posible.
Un pixel-art con una estética ochentera
La mayoría de estos juegos suelen ir acompañados de un estilo pixel-art muy marcado, similar a juegos de otra época pasada. Sin embargo, Deadly Days: Roadtrip ha conseguido seguir teniendo esa esencia pero transportándonos hacia los años 80 con un estilo mucho más divertido y humorístico. Asimismo, veremos como nuestra base se irá ampliando a medida que vayamos superando niveles y consiguiendo recompensas, consiguiendo al final que nuestro descanso sea mucho más vistoso y visual. Por otro lado, la banda sonora no consigue transmitir lo mismo que su estética, pero sigue estando a un gran nivel.
Deadly Days: Roadtrip al ser un roguelike de supervivencia tiene la misión de conseguir mostrar en pantalla muchísimas particulas en forma de disparos, enemigos o explosiones. Esto requiere de un gran trabajo técnico para no perder en ningún momento la claridad con la que poder ver a nuestro personaje en todo momento. Y eso lo hace a la perfección, consiguiendo tener momentos muy tensos en los que la pantalla está repleta de acción y somos conscientes de qué lugar ocupamos en todo momento.
En definitiva, Deadly Days: Roadtrip es una gran elección para todos esos amantes de los roguelike de supervivencia. Pero no será uno más, puesto que cuenta con mecánicas que lo hacen diferente al resto y con diferentes atractivos que te harán disfrutar de él incluso habiendo conseguido completarlo. Por tanto, es un juego que recomiendo a cualquier jugador que quiera disfrutar de una experiencia divertida pero sobre todo, a todos esos amantes de Vampire Survivors que vemos como cada cierto tiempo un estudio se fija en este estilo.
Puntos Positivos
- Perfecta sincronización en la gestión de inventario y la posibilidad de aumentar el mismo
- Variedad de personajes con los que poder disfrutar de nuestras partidas
- Un estilo gráfico único, que mezcla el pixel-art con el chibi por momentos
- Adictivo y divertido en todos los aspectos
Puntos Negativos
- Podría contar con una gran banda sonora, aunque la que tiene es bastante buena
