ANÁLISIS SPIRIT OF THE NORTH 2 PS5 – UN VIAJE MÁGICO
Hoy me toca hablar de un análisis en el que he estado trabajando la última semana y que realmente es bastante complicado hablar de él puesto que durante su realización he tenido sensaciones encontradas.
El juego en cuestión es Spirit of the North 2 de Infuse Studios y de Silver Lining Interactive el cual ha dado un salto de «calidad» al cambiar de motor gráfico al Unreal Engine 5 y del que os hablaremos a continuación no sin antes mencionaros que Tesura Games lanza en formato físico esta mágica aventura.
Una aventura que puede parecer algo hostil para el jugador al abrirse
Esta es la sensación que me ha dominado durante bastantes momentos del juego pero quiero matizarlo muchísimo para que no se me malentienda.
El juego mantiene sus influencias del original con su entorno islandés por lo que si habéis jugado al primero no os encontraréis con todo completamente nuevo.
Durante nuestra aventura acompañaremos a un pequeño zorrito acompañado por un cuervo que tras despertarse se aventura a buscar a los guardianes legendarios que han sido «corrompidos» por Gimnir, un chamán oscuro.
Nuestro viaje nos hará explorar SU BASTO MUNDO CON TOTAL LIBERTAD… libertad que tiene un precio bastante grande y aquí viene el adjetivo de «hostil».
Sin indicadores, con un mapa que vamos descubriendo poco a poco, sin un objetivo claro o un camino que seguir más allá de una estela roja en el cielo que veremos si tenemos el «cielo despejado»… esas serán nuestras únicas ayudas para saber dónde ir.
Esto se suma al hecho de que para abrir ciertas localizaciones tenemos que encontrar fuegos fatuos u objetos especiales. Sobre los objetos no hay problema porque están dónde las estelas… pero los fuegos fatuos van por nuestro ingenio a la hora de resolver ciertos puzles (si localizamos que hay alguno cerca) o si nos los encontramos pululando por ciertas localizaciones o si los canjeamos con nuestros pequeños mapaches a cambio de cristales.
Estas idas y venidas han provocado que haya pasado gran parte del tiempo dando vueltas de un lado para otro intentando averiguar que me faltaba.
Esto en parte es bueno porque he disfrutado de lo bello de su mundo pero a la vez he tenido una pequeña sensación de repetición que no se merecía el juego puesto que la «historia» que desarrolla me ha parecido interesante a medida que le pones un poco de atención.
Una jugabilidad que necesita pulirse mucho más todavía
Siendo completamente sinceros con vosotros durante las primeras horas ha sido bastante frustrante hasta que no logré obtener el poder de planear ya que el daño por caída era muy frecuente.
Pero esa sensación se ha mantenido también por el plataformeo que tiene que en muchas ocasiones no es preciso y en otras el zorrito parece que tiene patines (especialmente lo he sufrido en los dos últimos enfrentamientos de la aventura).
Esto es un problema que me ha afectado bastante sobretodo si tenemos en cuenta que en muchas ocasiones el escenario está completamente oscuro con los ajustes predefinidos. Cuesta seguir en los interiores el camino y esto provoca que en ocasiones demos más de un paso en falso.
Eso no quita que haya secciones muy interesantes y que nos hacen abrir la boca sobretodo en lo relacionado con los puzles en los que también sufrimos un poco pero esto es más debido al estilo artístico por el que ha apostado el equipo.
Si bien todo esto que he estado mencionando tiene connotaciones que se sienten demasiado negativas debo decir que al final… el juego apunta en parte a ello.
No puedo pretender que en plena cueva se vea todo como si estuviera de día pero lo que si puedo decir es que las partes dónde nuestro personaje pueda «escalar» sean más claras ya que el juego te da tanta libertad que parece que todo se puede «saltar» y en lugares dónde piensas que no puedes alcanzar la zona claramente te llevas la sorpresa y en otros es al contrario.
Con todo ello solamente puedo pensar que el juego todavía tiene margen de mejora para realizarse ciertos ajustes.
El crecimiento de nuestro zorrito es lo mejor que me ha podido dar
Todo lo que he mencionado hasta ahora del juego se puede suavizar en varios puntos gracias sobretodo al sistema de mejora por la que ha apostado Spirit of the North.
Aunque cuenta con un sistema de mejora de experiencia a través de la obtención de puntos mientras descubrimos cofres o pasamos por alguna localización especial el juego apuesta también por un sistema de runas y de un árbol de habilidades interesante.
Si que es cierto que no encontraremos grandes habilidades pero si que nos permiten aumentar las prestaciones de nuestro personaje.
Por ejemplo la que más útil que me ha resultado con diferencia ha sido la mejora de la habilidad de planeo aumentando su duración. Algo que he agradecido de manera bestial en mis dos últimos enfrentamientos «para salir victorioso» de la situación.
Sobre el sistema de runas lo bueno que tiene es que nos da un punto extra de personalización de nuestro zorro más allá de lo estético, que podremos cambiar tanto al principio como durante la aventura.
Estas runas nos permitirán poder modificar la jugabilidad activando o desactivando ciertas habilidades en cualquier momento sin limitación. Podremos equipar una concreta para que el cuervo nos ayude a su planeo o que nos permita realizar una elevación cuándo nos esté agarrando.
Pero hay otras que nos permiten localizar con mayor facilidad los fuegos fatuos o los pergaminos del saber, otra que nos permite dar un salto espiritual (doble salto), que nos permiten recuperar nuestra energía rápido o alterar algunas de las prestaciones de estas habilidades.
Esto es un completo acierto porque además nos exige el juego que las «dominemos» en cada momento y sobretodo con los enfrentamientos contra los jefes ya que serán pequeños puzles y supervivencias que deberemos superar.
Un mundo al que le falta viveza
Como ya he comentado nos encontramos ante un mundo basto, enorme, gigantesco pero al que le siento carente de vida.
El juego cuenta con muchas localizaciones que tienen que ver con la historia, zonas para poder descansar en forma de nidos, las cuevas dónde nos encontramos a los mapaches y grandes construcciones que nos dejan una vista impresionante… pero durante nuestra aventura nos encontramos bastante solos.
Si bien es cierto que puede tener un sentido argumental ya que ha habido una importante guerra que ha dejado desbastado gran parte de su mundo eso no quita esa sensación de completa soledad que se ve interrumpida por el comando hablar cuando lo pulsamos o el graznido de nuestro compañero alado.
Por otro lado a nivel técnico mi sensación es algo tibia puesto que hay localizaciones impresionantes pero hay otras que se sienten algo pobres o genéricas y esto si que es negativo ya que al 100% estaremos viéndolo ya que iremos de un lado para otro moviéndonos sufriendo cargas de alguna que otra textura de manera brusca o elementos que aparecen de golpe o sus tiempos de carga.
Por suerte… la banda sonora es fantástica y es una delicia escucharla durante la aventura. No me voy a quedar con esos momentos en los que se ve la escena bonita con los guardianes sino con la simple exploración y la magia que se siente cuando encontramos una localización importante.
Ojalá que con un par de parches más se solucionen algunos de los problemas técnicos del juego… porque a pesar de que lo que he comentado entiendo porque se ha apostado por este juego al tener su propia personalidad.
Conclusión
El juego es muy especial ya que está pensado para los amantes sobretodo de los Walking Simulator y que les encante disfrutar de una banda sonora preciosa. Pero tiene algunas cosas que pueden echar para atrás a muchos jugadores como la ausencia de objetivos claros.
Yo lo recomiendo sobretodo por su historia, más allá de las cinemáticas ya que te sientes implicado en lo que ha sucedido, y por algunos de sus paisajes.
Puntos Positivos:
- Su banda sonora
- La historia que te cuenta la sientes como propia sobretodo con las escenas de los guardianes
- Hay localizaciones que dejan una gran estampa
Puntos Negativos:
- Su mundo a pesar de ser bello en muchas ocasiones se siente vacío
- Es bastante hostil en el sentido de que apenas tienes guía y, aunque hay otros muchos juegos que juegan con lo mismo, aquí se siente especialmente hostil
- A la hora de las plataformas es algo frustrante