ANÁLISIS ONCE UPON A JESTER PS5
Toca volver a los análisis y en esta ocasión nos adentramos en la aventura de Bonte Avond, Once Upon a Jester, en su versión de PlayStation 5 para compartir con vosotros nuestras impresiones de esta curiosa y divertida aventura.
Una obra llena de humor con un objetivo imposible
En esta aventura acompañaremos a dos bufones muy peculiares, Jester y Sok, quienes intentarán infiltrarse en el castillo para robar la joya de la corona y para ello deberán ser los mejores artistas del reino.
Un objetivo bastante complicado puesto que deberán encandilar a la gente durante su gira improvisando diversas obras. Obras que deberán ser de los más variadas cumpliendo los gustos de cada región y la verdad es que… lo logra.
Lo logra gracias a sus divertidas líneas y a la disparidad existente que hay entre ambos personajes con respecto a sus personalidades que les convierten en una fusión bastante curiosa dónde en varios momentos romperán la cuarta pared e incluso ciertos elementos teatrales.
En este tipo de interpretaciones dónde el humor es el centro de todo, pero en el que deberemos trabajar con distintos géneros teatrales, todo se basa en un giro final que dará el golpe final a lo ridículo teniendo el protagonismo el jugador al poder elegir el orden de los actos para la ocasión y haciéndonos participes de la barbaridad aunque guarda ciertos momentos más calmados dónde las historias de nuestros personajes serán interesantes.
El juego en este sentido es bastante simple ya que se asemeja a un juego de puzles y conexiones lógicas simples pero es que es justamente lo que necesita junto a otros dos elementos importantes.
La importancia de lo visual y lo auditivo se incrementa en esta ocasión
Claramente estamos ante una obra de teatro y por lo tanto debemos intentar enganchar al público, entre el cual estamos nosotros también. Es por ello que digo que es muy importante en esta aventura tanto el apartado visual como el apartado sonoro.
Sobre este último debo destacar que me ha parecido bastante atractivo y que le sienta muy bien al estilo de juego que han planteado sus desarrolladores… y es que ha sido compuesta por los mismos…
Ya solo con esto hubiera sido suficiente… pero es que logran que cada obra se sienta única adaptándose bastante bien a cada ocasión incluidos los momentos en los que no estamos en el escenario.
Por otro lado el juego se siente a nivel visual como si estuviera la obra pensada para entretener a los más peques… y una vez más creo que logra su objetivo ya que se siente completamente adecuado a la visión de Once Upon a Jester.
Y es que la historia parece justamente una obra de teatro minimalista dónde todo da la sensación de ser una obra completamente improvisada para la ocasión y lo veremos más cuando visitemos cada localización.
Conclusión
Once Upon a Jester ha sido una pequeña sorpresa y la verdad es que no puedo hacer otra cosa que recomendarlo ya que se siente bastante fresca y entretenida.
Puntos Positivos:
- Una obra que no te arrepentirás de visitar
- Su apartado visual y sonoro logra cumplir su objetivo
- Cortito y al pie
Puntos Negativos:
- Puede que se sienta algo repetitivo a la larga
