ANÁLISIS MOTOGP 25
Fui yo mismo el encargado de traeros el análisis de Moto GP 24 el año pasado. Y en esta ocasión, vuelvo a ser yo quien os traiga el análisis de MotoGP 25, la nueva entrega del estudio italiano Milestone con el que quieren coronarse como el mejor simulador de motos. Tras dedicarle muchas horas, hoy os vengo a hablar de esta nueva entrega y acabaremos sabiendo si es la mejor de todas las existentes. Pero ya os anticipo que el salto de calidad ha sido muy notorio.
Para empezar, la gran novedad y de la que se ha «presumido» desde los primeros tráileres promocionales, ha sido el salto a Unreal Engine 5. Sin duda, además de seguir la tendencia visto en otro tipo de juegos con entregas anuales o casi anuales, era necesario ese upgrade en su apartado visual, puesto que estaba quedando algo desfasado ya. Pero no nos quedemos ahí, puesto que hay muchas otras novedades. Así que vayamos por orden e intentemos desgranar que tiene MotoGP 25 por ofrecernos.
Para empezar, la apuesta troncal sigue siendo su Modo Trayectoria. Es sin duda por donde empezarán muchos jugadores y creo que es la experiencia más completa que existe en el juego. Este modo viene con una gran novedad: podremos empezar desde la categoría que queramos. Si eres de los que juegas cada año a esta entrega, te podrás saltar Moto3 y Moto2 e ir directamente a la categoría reina. Eso sí, si eres de los que juega esporádicamente, recomendamos hacer todo el trayecto desde lo más abajo posible. Básicamente debido a la diferencia de cilindrad y potencia entre las motos.
Así pues, deberemos «crear» a nuestro piloto con todo tipo de personalización visual (parches, logos, etc) y lanzarnos a competir en fin de semanas para conseguir el mayor número de puntos posibles. Vamos, como en la vida real. Y como así ocurre, al acabar un Gran Premio, surgirán nuevas opciones para mejorar nuestra moto. Y será todo muy orgánico, ya que esas mejoras se trabajaran desde conversaciones (ficticias) con nuestros ingenieros. Mejor que un sistema de menús que puede ser algo más frío.
De igual manera que ocurría el año pasado, la importancia de las redes sociales seguirá y con interacciones con los demás pilotos podremos «ganarnos» enemistades que se traducirán en la pista en comportamientos de los rivales más agresivos hacia nosotros. Y eso tendrá importancia también en un mercado de pilotos que se mantendrá como el del año pasado.
Pasando ya a lo que es el sentimiento propiamente de conducción, he de decir que aquí también se ha dado un paso adelante. Pero sobre todo para no dejar a nadie atrás gracias a su nuevo sistema de físicas arcade. Con los cambios introducidos, se puede llegar a simplificar la experiencia hasta tal punto que lo único que tienes que hacer es conducir y despreocuparte de todo lo demás. Eso sí, si eres de los que les gusta controlar hasta el último tornillo, podrás seguir haciéndolo con detalles como la gestión de los neumáticos etc.
En definitiva, estamos ante una sensación de conducción muy mejorada (por ejemplo incluso los sonidos son aun más reales) y que se puede adaptar a multitud de pilotos, desde los más noveles hasta los más exigentes.
Anteriormente os hablábamos del modo Trayectoria, pero no será este el único modo. De hecho, la gran novedad es la inclusión de poder pilotar 3 tipos de motos diferentes a las de MotoGP. Este año podremos batirnos el cobre en motos de motocross, minimotos y con motos de cross sobre asfalto. Sin duda un gran añadido que aporta muchísima variedad. Además, os detallamos todos los demás:
– Gran Premio: disputar un fin de semana de Gran Premio a tu elección
– Campeonato: tu eliges que carreras incluir en un campeonato anual
– Time Attack: para batir tus mejores marcas y las de tus amigos online.
– La Academia de MotoGP: donde entrenarás a modo de tutorial para practicar
– Diferentes modos online o incluso en cooperativo a pantalla partida (no probados en esta review)
Pero voy a acabar este análisis con lo que creo que es el salto más importante de la franquicia: su apartado visual. El hecho de rehacer el juego por completo y basarse en Unreal Engine 5 ha sido todo un acierto. El juego lo he podido disfrutar en una PS5 normal (no Pro) y he de decir que se ve de maravilla.
Y las mejoras visuales se notan en varios frentes. Para empezar, el modelado de los pilotos está más elaborado que en años anteriores y ahora sí que se parecen bastante a los de la vida real. Si bien hay excepciones en pilotos «menores», las grandes caras de la parrilla lucen una fidelidad muy digna.
Pero las motos son las que se ven aún mejor. Si ya se veían bien el año pasado, en esta ocasión lucen aún mejor. El nivel de detalle de las mismas es espectacular e incluso ciertos detalles visuales como los destellos y demás están muy bien logrados. Pero es que además eso también se nota en las físicas, puesto que las curvas se sienten aún más reales gracias a ese «upgrade» en lo visual.
En definitiva, y sin ánimo de querer alargarme más, he de decir que desde Milestone han dado con la tecla este año y tenemos el mejor juego de MotoGP que podíamos pedir. Con infinidad de contenido y un diseño visual espectacular, el salto de calidad de este año ha sido muy notorio, dejando atrás, y a mucha diferencia, a sus anteriores entregas.
PUNTOS FUERTES:
- El salto gráfico gracias a Unreal Engine 5
- Cantidad de modos disponibles
- La experiencia puede ser lo arcade/pro que tu quieras
PUNTOS DÉBILES:
- La versión probada aún carecía de las motos de 2025
