Análisis Candy Rangers
l mundo de los análisis nos ha llevado en esta ocasión a ponernos con un traje de azúcar para poder traer este Candy Rangers en su versión para Playstation 5. En esta ocasión nos encontramos ante un título indie español desarrollado por Mechano y distribuido por Jundisoft. Un shooter sobre raíles con toques de plataformas que mezcla lo mejor de los recreativos noventeros con el frenetismo de los indies actuales.
La trama de Candy Rangers es la siguiente: «Hace mucho tiempo, en este planeta, una tribu vivía en paz y armonía con la naturaleza. Esta gente, conocida como los Sinno, amaba la energía que emanaba de la tierra. Sin embargo, un aciago día los Sinno abusaron de esta bendición. Esta cruel maldición hizo que los Sinno perdieran la cabeza. Transformándose así en criaturas errantes. Y como castigo, la propia tierra les maldijo. Los humanos, aterrados por estos monstruos, lucharon como valientes rangers». Tal y como puede ver, no estamos ante algo digno de ganar un premio por su originalidad ni nada por el estilo pero nos sirve para dar el primer paso. Y avanzamos que no debéis esperar ningún giro de guión aunque si algo de humor que es de agradecer.
Lo que hace especial al juego es que controlamos a los cuatro rangers al mismo tiempo, algo que en ocasiones puede probar un auténtico caos.Eso si, el juego es capaz de funcionar en su totalidad a unos 60 fps que son de agradecer. Cada color elimina a enemigos de su mismo color, lo que añade un factor de estrategia tipo “piedra, papel o tijera” pero con caramelos.
- Disparo de colores: Cambiar entre rangers en tiempo real es fluido y obliga a estar alerta.
- Plataformeo ligero: Hay saltos, deslizamientos y hasta algún parry que, bien ejecutado, te abre caminos secretos.
- Exploración alternativa: Algunos niveles permiten dividir al equipo y explorar rutas diferentes. Esto aporta mucha rejugabilidad, porque siempre quieres descubrir qué había en ese otro camino.
- Jefes finales: El juego cuenta con 4 jefes enormes más un combate final que recorre todo el mapa, todos con mecánicas únicas que te obligan a alternar entre rangers constantemente.
- Variedad de escenarios: cada nivel está ambientado en una hora distinta del día, lo que le da un toque dinámico y visualmente variado.
En conclusión, con Candy Rangers estamos ante una situación parecida a la de abrir una bolsa de chuches en los recreativos de los 90: colorido, divertido y adictivo, pero con el riesgo de empacharte si no controlas. Es un título que brilla por su originalidad, rejugabilidad y optimización, aunque puede desesperar a los jugadores más casuales por su exigencia en las fases finales.
